La producción audiovisual más longeva de la televisión española llego a su fin el pasado domingo, Mediaset España decidio no renovar por más temporadas la ficción.
«Soy optimista de carácter y creo que todo es celebrable, y más en esta serie que ha sido siempre un éxito, pero cuando te ponen un resumen de estos años, al final te rajas, y dices ¡qué pena!», ha dicho el actor Paco León, tras ver un vídeo que repasaba la vida de su personaje, el Luisma, y sus singulares vecinos del barrio de Esperanza Sur hasta llegar al capítulo 237.
Allí se presentará la propia Aida -interpretada por Car
men Machi, hoy ausente en la rueda de prensa por motivos profesionales-, que desde su forzado retiro en Cuba se cuela una delegación deportiva que viaja a España, lo que hará que Chema (Pepe Viyuela) adelante la boda con Soraya (Miren Iberguren) para darle una sorpresa.
«‘Aida’ no acaba, es eterna, porque quedará para siempre entre el público que la ha sostenido durante todos estos años», ha dicho medio en broma medio en serio Viyuela.
Mientras, Melani Olivares -cuyo personaje, Paz, está cada vez más convencida de volver con Luisma-, no podía contener las lágrimas al recordar que ha pasado «una década de trabajo aprendiendo entre grandes compañeros; el último día de rodaje fue muy triste».
La serie, que se estrenó en enero de 2005 con un capítulo que vieron una media de 6,8 millones de espectadores (36 % de cuota de pantalla), se ha convertido en la comedia más longeva de la televisión en el Estado en horario de máxima audiencia.
«Despedimos a la comedia de la que se hablará cuando se escriba la historia de la ficción española», ha afirmado Daniel Écija, presidente de Globomedia, la productora que apostó junto a Telecinco hace diez años por sacar el personaje de Aida de la serie «7 vidas» y convertirlo en la primera serie derivada de otra.
«Agradecemos a Telecinco que nos haya permitido irnos un minuto antes de que nos echasen», ha recalcado Écija sobre el momento elegido para decir adiós a la ficción, y ha recordado que la serie se ha adaptado a 13 países.
Paco León ha incidido también en que ‘Aída’ se cierra «bien», con una «pedazo de capítulo», en el que además de Machi estarán otros actores que dejaron la ficción, como Ana Polvorosa y Secun de la Rosa.
Para David Castillo, el «niño» de la serie, que hoy ha dicho no reconocerse en las imágenes de las primeras temporadas, el final ha sido «muy emotivo, como despedirme de una familia con la que he crecido estos años».
No todo fueron penas, según ha explicado Mariano Peña, el xenófobo dueño del «Bar Reinols», que ha recordado cómo la escena que iba a ser final, con todos los personajes reunidos en el local, se convirtió en una «juerga en la que bebíamos vino de verdad» al conocer que ‘Aída’ se prolongaba siete episodios más.
«Cuando algo tan grande se va deja hueco, se despide todo un universo formado por un grupo de desgraciados que se ríen de sí mismos y que de alguna manera han sido una radiografía de nuestro país», ha señalado a Efe el director general de Globomedia acerca de las claves de la pervivencia de «Aida», a la que ha calificado de «valiente, progresista y atrevida».
El productor ejecutivo de la serie, Julián Sastre, ha hablado en nombre del equipo técnico de ‘Aída’ para señalar que en el éxito se ha basado en «trabajar en todos los capítulos como si fuesen el último».
Miren Ibarguren ha reconocido que entró en la serie hace seis años «con un papel difícil», pero sus compañeros le ayudaron mucho hasta encontrarse «como en familia».
Una familia que se despedirá de la televisión, al menos con el Luisma encabezando una eventual serie derivada, según explicaba Paco León: «El spin off de ‘Aída’ ya lo hemos hecho desde que se fue Carmen Machi…».