1- Hacer Windows mas rapido: Para ellos existe Autorun Organizer, una herramienta gratuita que analiza automáticamente los programas que se cargan durante el arranque y recomienda cuáles podemos eliminar o demorar para que se inicien unos minutos después. Cuando arranquemos el programa veremos un listado similar al que podemos ver en la pestaña Inicio del Administrador de tareas, solo que podremos ver muchos datos adicionales como el el tiempo que ha tardado en arrancar el sistema durante las últimas semanas. Además, en la lista están mezclados los elementos del inicio del registro con las tareas programadas a horas determinadas. Podeis ver de forma mas extensa esta informacion en una pagina de Contenido Tecnológico FULL.
2- Eliminar archivos temporales de tu ordenador: También es conveniente depurar el equipo de archivos temporales de Windows. Para ello, sólo tienes que localizar la carpeta en tu ordenador y borrar todo su contenido. La La ubicación de la carpeta suele estar en C:\ , carpeta Windows y, dentro de ella, buscamos la carpeta ‘Temp’. En esta carpeta seleccionamos todo y lo eliminamos.
La siguiente ubicación de archivos temporales es en la carpeta personal de cada usuario. Estos se encuentran en la ruta C:\ > Usuarios> nombre de usuario> AppData> Local > Temp. Borra también todo lo que encuentres en esta carpeta.
3- Eliminar archivos temporales de internet: Abre tu navegador y en el menú de Archivo> Herramientas, selecciona ‘Opciones de Internet’. En la primera opción ‘Archivos temporales de Internet pulsa ‘eliminar archivos’.
4- Memoria RAM: Cuánta más memoria RAM tenga tu ordenador, más rápido será. Sobre todo si utilizas programas ‘pesados’ como videojuegos o software de edición de vídeo.
En un ordenador de sobremesa suele ser fácil de cambiar. Tan solo hay que abrir la caja de la CPU y buscar el ‘slot’ correspondiente y sustituir la vieja memoria o ampliarla.
En los ordenadores portátiles la cosa se puede complicar un poco, pero por lo general no es muy complicado. Muchos fabricantes sitúan cerca de la batería el lugar de la RAM, para que sea fácilmente accesible. Pero si tenemos algo de miedo, no hay por qué pasarlo mal: en la misma tienda en la que compremos la ampliación de memoria nos la podrán instalar sin problemas.
5- Disco duro de estado solido (SSD): Si vas a comprar un ordenador nuevo, ni te lo pienses: compra uno cuyo disco duro sea de estado sólido, y no uno tradicional. Esta decisión hará que tu ordenador vaya mucho más rápido.
El secreto de los SSD es que almacenan la información en chips semiconductores en vez de en un disco magnético como los SATA o ATA. No tienen partes que se mueven, ni tardan tanto en iniciarse cuando el ordenador se enciende.
Este tipo de discos duros son parecidos a los que llevan los smartphones o las tabletas, dos paradigmas de la rapidez (sobre todo si los comparamos con los ordenadores).
Lo único malo de los SSD es su precio y su capacidad de almacenamiento. Los que tienen más capacidad son de 840 GB, y cuestan unos 500 euros. El SATA más caro vale alrededor de 200 euros y nos permite almacenar 4TB. Los SSD más habituales son los de 128 GB y cuestan 120 euros, y los SATA más vendidos son los de 1 TB, que cuestan 60 euros.
Pero los SSD son tan superiores que en no mucho tiempo serán el estándar, lo que significará que sus precios bajen considerablemente. No hay que olvidar que en 2008 uno de 32 GB podía costar 500 euros.
6- Mantener limpio el ventilador: La mugre que abunda en las rejillas del ventilador de nuestro ordenador pueden hacer que se recaliente y no funcione todo lo bien que debería. Así que de vez en cuando conviene ponerse en modo ‘Bricomanía’ y abrir la caja de la CPU para limpiarla un poco. Nuestro PC nos lo agradecerá funcionando más rápido.
-7 Programas: CCleaner puede ayudarte a localizar y borrar programas y archivos inecesarios, lo que liberara memoria y mejorara el rendimiento del ordenador.