Financiación con créditos la producción audiovisual
creditos para producción audiovisual
La principal traba de los creadores creativos es la falta de liquidez
monetaria para desarrollar cada nuevo proyecto que quieran
iniciar.
El hablar de varios miles o incluso millares de euros de presupuesto
implica que solo las grandes productoras tengan la posibilidad de producir
dichas creaciones pero incluso tienen que recurrir a solicitar
créditos bancarios a las entidades de crédito, y ante la crisis
actual la exigencia de presentar fuertes avales (teniendo que hipotecar en
muchos casos casas y viviendas) es una realidad constante y palpable.
Se han explotado nuevas formas de conseguir el dinero para poner en
marcha una producción de este tipo, como la de conseguir el dinero a
través de pequeñas aportaciones de amigos o
conocidos y con el pacto de corresponderles con una parte de
los beneficios pero sin lugar a duda la más innovadora ha sido conseguir el
dinero a través de aportaciones de desconocidos a través del
llamamiento a través de internet.
Para cualquier productor que precise conseguir un crédito con el mejor
tipo de interés aplicable es acudir a un comparador web de
préstamos: consultar más información
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Una técnica que está dando muy buenos resultados es vender
publicidad a las diferentes empresas, siendo una publicidad
enmascarada pero que es muy rentable para los promotores de los
productos y al mismo tiempo muy rentable para los productores las obras audiovisuales ya que consiguen el aporte necesario para hacer frente a
todos los gastos que implica la creación de la obra.
Por desgracia la cultura, en todo tipo de artes escénicas no está
especialmente apoyada por las instituciones, y siempre se tiene
que recurrir a financiación privada que lógicamente busca un beneficio a
la inversión o desembolso del capital.
Las producciones visuales pueden ser muy diversas y entre las más
agradecidas son aquellas que se comparten de forma pública y
sin coste económico para el espectador, como pudiera ser los
juegos de luces que se exponen en diferentes edificios públicos, lo cual
supone que se puede repetir la representación visual en diversas ciudades
y monumentos con lo que la inversión realizada por los promotores se ve
rentabilizada con la realización de los diversas sesiones o espectáculos
repartidos en toda la geografía, habiendo cuenta que la inversión inicial
puede superar los 10.000 € dependiendo de la complejidad y la duración
que tenga el espectáculo.